Falta de atencion

Estaban en la mesa al lado mía, me gustaría decir que parecían dos tipos normales, pero había algo que me inquietaba. Parecían como rodeados por algún no sé qué, que hacia parecerlos lejos, a pesar de estar en la mesa de al lado mía.
¿Yo?, esperaba a un cuate, así que me encontraba en la situación de no saber dónde chingados posar mi atención
Ligeramente escuche decir a uno, “…imagina por un momento que no eres tú, –le decía a su amigo- imagina seriamente que eres un desconocido, desde el fondo de tu estómago, que eres un desconocido, ¿sientes? –le decía-, ¿sientes?”.
En ese momento recordé que esa plática la había tenido yo mismo, y mi compañero frente a mí, era quien me daba indicaciones., y ahí al lado había un tipo, un desconocido, seguramente esperando a alguien., pues de lejos se notaba que no sabía dónde chingados poner su atención.

Ventana

Una noche de un 27 de junio descubrí por casualidad entre viejos libros de un amigo arquitecto -con el que estaba bebiendo unas cervezas-, uno que contenía algunas curiosidades sobre los elementos de una casa, hojeándolo descubrí un hecho que de alguna manera empezaba a entrever en mi quehacer arquitectónico., “…las ventanas – decía- deben ser grandes y fáciles de abrir desde dentro, el uso verdadero de estas no es el de iluminar o ventilar, sino uno ya olvidado pero verdaderamente más útil, el de escapar, de tal modo que deben estar diseñadas y orientadas para proveer de una salida rápida en caso de una eventual emergencia y el usuario pueda liberarse lo más pronto posible por la ventana.”
Incluía también una breve lista de las más socorridas eventualidades y una de ellas era la de salir sin ser visto por el conyugue., propietario de la casa.

mi deseo

El sonido del ventilador me arrullaba, mientras yo, acostado, deseaba dormir. Cuando de repente, se me ocurrió, que si repetía, una y otra vez pidiendo averiguar la solución a mis problemas. Esta se me revelaría en el sueño.
Así que, repetí, una y otra vez mi deseo, hasta que no se que tantas veces lo hice, y me quede dormido.
Soñé, que repetía, una y otra vez la misma frase interminablemente y estaba destinado, a que así fuera para siempre. La desesperación me abrumaba tanto, que cuando desperté, me sentí tan aliviado., que ya me había olvidado por completo de todos mis problemas.

re-produccion animal

Por algún lugar, alguna vez todos hemos escuchado hablar de nuestro lado animal, la verdad no tenemos ningún lado animal somos esféricamente animales por todos lados, dignos de salir en una serie de national geographic. Solo muy pocos y valerosos ellos son en realidad seres humanos. Y es que para vivir no necesitamos pensar, de hecho no necesitamos hacer nada mas allá de los necesariamente básico, que para resumen es lo que hacemos todos, cada día de nuestra vida. Impulsados por los instintos más básicos, nos ganamos el dinero para tener una covacha donde vivir, para salir cada semana con algún grupo a beber, para comer, para vestirnos, para tener sexo o reproducirnos, para pagar las cuentas que eso genera y es un ciclo interminable que agota la vida de ese ser que vive sin saber para que vive, precisamente porque no necesita saberlo, sumidos en la practicidad de la existencia, nunca existimos, simplemente nos consumimos dejando espacio para que otra generación haga exactamente lo mismo. O a caso tenemos un pensamiento que nos lleve mas allá de lo meramente necesario?, a caso nos levantamos todos los días impulsados por otra cosa que no sea la necesidad?, me levanto yo pensando en esa idea que me sublevara?, a mi y solo a mí. Esa idea me mueve de cierto en cada paso que doy?. Nace esa idea de mis necesidades animales o de mi necesidad de ser humano?, sirve para los humanos o sirve para los animales? En lo que la encuentro, me levantare por una cerveza, eso sí, bien helada.

Lo único interesante?...

Es el profundo brillo de el cristal de una botella con alcohol. O el olor que deja en tus manos tener un montón de billetes. O sentirlas llenas de la textura suave y tibia de una mujer. O que tu hijo te diga te quiero., a donde me vas a llevar comer.

Abuso

Abuso cuando enciendo un cigarrillo mas, sabiendo que he fumado demasiado. Cuando insisto, sabiendo que he insistido demasiado. Cuando bebo, sabiendo que he bebido demasiado. Cuando hiero, sabiendo que he herido demasiado. Cuando nada me importa lanzándolo todo al demonio. Cuando te escribo, sabiendo que no contestaras mas. Cuando pienso en ti, aun sabiendo que tu ya no piensas en mi. Cuando sigo pensando que todo está bien. Cuando sigo pensando que todo está mal. Cuando inicio, sabiendo que no me paro nunca. Cuando afirmo algo, sabiendo que estoy equivocado. Cuando me equivoco, e insisto en mi equivocación. Cuando insisto en mi equivocación encendiendo un cigarrillo mas. Cuando afirmo equivocadamente sabiendo que estoy bebiendo demasiado. Cuando hiero a alguien sabiendo que estoy equivocado. Cuando lanzo todo al demonio insistiendo en mi equivocación. Cuando equivocadamente te escribo sabiendo que afirmativamente nuca contestaras. Cuando insisto en pensar en ti equivocada e insistentemente. Cuando insistentemente inicio y equivocadamente nunca me paro.

tu

Me encuentro bien, estoy bebiedo una botella de vino tinto que traje de Parras, antes de eso una de tequila, y me dieron ganas de escribir algo. Por que tambien estoy pensando en ti, que me acompañas ahora que estoy solo. Eres tu, la musica de deep purple, la botella y yo. Tengo poco que decir por que con el tiempo he aprendido eso, a decir poco. Las sensaciones son muchas, las expresiones pocas, cuando te vi todo estaba calmo, todo en su lugar, aun me acuerdo. Contigo las cosas no son normales, me pierdo, no tengo control sobre mi y aun que lo intente, no es lo mismo, es un vicio, me haces daño, te necesito. Cuando desperté, tu aun estabas allí. Con gusto te invitaría un trago y después (aun que ni tu ni yo creamos) Dios dira. Te gusta la Indio, lo se y a mi también, tengo eso y mas. La risa nos invadiría, se apoderaría de nosotros y yo contento te veria reir hasta morir, hasta morir los dos, de risa. Desnudos los dos, tirados en la cama, tirados y cansados, hablando pendejadas, que felicidad. Deja me sirvo mas. Deja te toco aquí. Estas triste? Escuchemos al cuarteto feliz, escuchemos a The Dave Brubeck Quartet. De pequeño me golpee la cabeza, creo que si, el fantasma de el soldado dejo sus botones de oro y yo los voy a encontrar. Acercate, tengo tiempo.